¿Otitis? ¿Hipoacusia? ¿Drenajes timpánicos? Resolvemos dudas!
Durante los primeros años de vida es frecuente que los niños padezcan otitis media aguda o acumulación de moco en el oído medio. Esto es debido a un mal funcionamiento de la trompa de Eustaquio, ya que los oídos del niño todavía no están desarrollados completamente y tienen dificultad para evacuar los depósitos de moco.
En ocasiones se dan estas otitis repetidamente y hay peligro de sordera, provocando en el niño una leve hipoacusia que, generalmente, es bilateral. Así pues, el otorrino decide en la mayoría de casos que es oportuno realizar una intervención rápida y sencilla llamada miringotomía y la colocación de drenajes timpánicos para drenar el moco.
Tras el periodo de infecciones de oído y la intervención pueden pasar meses, incluso un curso escolar, en el que el niño ha perdido audición y posiblemente también información y aprendizajes que se han llevado a cabo en clase.
Esta situación es susceptible de provocar un retraso en el lenguaje del niño, por lo que se recomienda, en el caso que haya dificultades en el lenguaje, que el logopeda realice una valoración y proponga un tratamiento para mejorar las habilidades lingüísticas del niño. No obstante, a continuación dejo una lista de consejos sobre cómo podéis ayudar a vuestros pequeños.
¿Cómo puedo ayudarle?
1. Hablándole despacio, en un ambiente relajado y vocalizando para que pueda entenderte bien.
2. Evitando los espacios con mucho ruido y ambientes donde los decibelios son altos.
3. Acompañando si es preciso el habla con gestos sencillos.
4. Dejar que se exprese sin presiones ni prisas, intentando entender qué quiere decirnos.
5. Hablándole correctamente y sin imitar su forma de hablar.
6. Dándole tiempo para que responda a tus preguntas.
7. Repitiéndole todo las veces que necesite, pero de manera natural.
8. Adaptando la longitud de tus enunciados a la capacidad de tu hijo.
9. Eligiendo actividades motivadoras para que provoquen lenguaje en el niño.
10. Promoviendo juegos en los que se utilice el lenguaje. Por ejemplo el «veo-veo», cantar canciones, trabalenguas, contarle cuentos, etc.